Vivir solo es un gran paso. Imaginar que tendrás tu propio espacio y libertad resulta emocionante, pero claro que también implica responsabilidad. Para disfrutar de esta nueva etapa en tu vida, te recomendamos que tomes todas las precauciones necesarias.
Sabemos que si apenas empiezas a vivir por tu cuenta, es decir, fuera de casa de tus papás, entonces es muy probable que vayas a rentar un departamento. Sobre todo para la generación millennial, debido a la situación económica actual, adquirir una casa o departamento es casi imposible, e incluso pagar una renta completa es también complicado, por ello tener un roomie es cada vez más común. De acuerdo a un estudio realizado por la consultora Atlantia Search, tan sólo en México, seis de cada 10 jóvenes comparten o han compartido departamento en algún momento de sus vidas.
En México, seis de cada 10 jóvenes comparten o han compartido departamento en algún momento de sus vidas.
Vivir con un roomie tiene ventajas; la más obvia es dividir la renta, y claro que también es importante la compañía y el apoyo en ciertas labores del hogar. Sin embargo, no es fácil vivir con alguien, sobre todo si es una persona que tiene hábitos muy diferentes a ti, y aunque lo ideal es vivir con alguien de confianza, a veces no es posible y si lo es, siempre habrá cosas que descubras en el camino.
Contratar un seguro de casa habitación en CDMX te dará la tranquilidad necesaria para olvidarte de cualquier accidente que el inmueble o su contenido pueda sufrir. Quizás tú seas muy responsable, pero los accidentes pasan. Además, ¿puedes meter las manos al fuego por tu roomie? En caso de algún accidente, estar protegido evitará mayores problemas con las personas que vives. Quizás entre varios compraron algunos muebles, entonces podrían contratar una sola póliza que cubra el valor de los bienes en conjunto.
Contratar un seguro de casa habitación en CDMX te dará la tranquilidad necesaria para olvidarte de cualquier accidente que el inmueble o su contenido pueda sufrir. No importa si eres o no dueño de la propiedad donde vives.
No importa si eres o no dueño de la propiedad donde vives, de cualquier forma puedes cubrirla y asegurar los bienes en caso de siniestro. En muchos casos el inquilino no le da la importancia necesaria a su hogar, y algo que deberías saber es que si estás rentando también puedes contratar un seguro de casa habitación y proteger tus pertenencias. Si no eres dueño, el seguro cubre tu patrimonio, es decir el contenido del lugar donde vives. Si eres dueño, el seguro protegerá tanto el contenido como la infraestructura del edificio. Entre los daños que se cubren están los ocasionados por incendio, descargas eléctricas, inundación y robo.
Algo importante a considerar es que si rentas y ocasionas algún daño al inmueble, estás obligado a pagar los daños ocasionados. Esta responsabilidad civil de arrendatario queda cubierta si cuentas con un seguro de casa habitación, es decir que si rentas y adquieres este seguro, la aseguradora se encargará de cubrir los daños.
Para que sólo tengas que preocuparte de pagar la renta, te ayudamos a contratar un seguro de casa habitación en CDMX. Contáctanos y nosotros te asesoraremos para elegir el seguro ideal.